El segundo solsticio del año es el 22 de diciembre que coincide con la entrada de la estación invernal, se trata del solsticio de invierno. La hora dependerá del año en cuestión; por ejemplo, el pasado 2015, el 22 de diciembre de ese año entró el invierno a las 5:48 de la mañana.
Un solsticio es un momento del año en donde el sol es capaz de alcanzar su mayor o la menor altura en el cielo; precisamente por ello, tanto la duración de la noche como del día son las máximas se pueden llegar a producir. También tienes que saber que este comportamiento se invierte en cada uno de los hemisferios; por lo que, en el momento en el que se produce el solsticio de invierno en el hemisferio norte, se está produciendo su homólogo solsticio de verano en el hemisferio sur.
A continuación, vamos a profundizar un poco más en este tema para que lo puedas entender mucho mejor.
Tabla de Contenidos
Todo lo que tienes que saber sobre el solsticio de invierno
Explicación
Esto se produce de esta manera porque las estaciones dependen en todo el momento del eje de inclinación de rotación de nuestro planeta respecto al propio plano de su órbita; y no de la distancia que en ese momento haya entre el sol y la tierra. Por esta razón, las estaciones se encuentran invertidas tal y como hemos comentado anteriormente en contraste con los dos hemisferios: mientras que en uno tenemos un día mucho más largo, en el otro tendremos un día más corto.
Ahora bien, también tienes que saber que los diferentes solsticios no se producen en el mismo día y a la misma hora; la razón de ello es que el periodo orbital de la tierra no es exacto: hará falta 365,2425 días en conseguir realizar un giro completamente alrededor del sol. Para poder compensarlo, lo que se hace es introducir el concepto de año bisiesto en donde se añade un día adicional que se va consiguiendo gracias a estos decimales que cada año que no lo es van añadiendo. Sin embargo, existen algunas pequeñas diferencias entre los diferentes husos horarios que hacen que la sucesión de los solsticios no sea exacta.
¿Y si variase el grado de inclinación de la tierra?
Vamos a suponer por un momento que la tierra fuera perpendicular al plano de su propia órbita para poder analizar cómo afectaría esto aleje de su rotación y, en definitiva, al solsticio de invierno. En este caso, lo primero que descubriríamos es que el sol saldría por el este y se pondría por el oeste además de que tanto las noches como los días durarían exactamente lo mismo. Sin embargo, esto en la tierra tan sólo ocurre un par de días al año y estos se denominan equinoccios. Además, otra de las consecuencias de este cambio es que no existiría diferencia alguna entre las estaciones.
Ahora bien, sabemos que esto no es así ya que la tierra tiene un grado de inclinación de 23° y medio sobre su propio eje y, por esta razón, los días y las noches van variando en base a su duración: en los equinoccios, la duración tanto de la noche como del día es exactamente la misma, así como que el sol sale exactamente por la zona este y se pondrá con exactitud por el oeste. Después, el sol saldrá en una posición más situada al norte o bien hacia al sur hasta llegar a una posición extrema en donde nuestra estrella parecerá que ha detenido su avance y volverá a regresar de nuevo a la posición de origen. En este punto se produce lo que se conoce como solsticio que es el equivalente al conjunto de palabras “sol quieto”.
¿Qué ocurre en nuestro planeta durante el solsticio de invierno?
En la fecha en la que se produce el solsticio de invierno se producen toda una serie de sucesos a lo largo de nuestro planeta: por ejemplo, en la región norte del círculo polar ártico no va a salir el sol mientras que, por el contrario, en la región situada al sur del círculo polar ártico, el sol no se va a poner y va a permanecer en el cielo girando alrededor de cualquier persona que pueda estar mirando tan emblemático espectáculo.
Tienes que saber que en los polos no va a salir el sol hasta que finalmente se produzca el equinoccio; será de día durante seis meses seguidos y luego será nuevamente de noche durante otros seis meses.
¿Cómo se puede medir o identificar un solsticio o equinoccio?
En contra de lo que te puedas llegar a pensar, tanto un solsticio de invierno como un equinoccio se puede medir con técnicas muy rudimentarias, no necesitaremos ningún tipo de aparato de última tecnología. En la antigüedad se utilizaban simplemente piedras o un palo que ayudarían a observar el cielo, en este caso nuestro astro principal, para poder determinar la fecha exacta en la que nos encontramos. En algunas civilizaciones antiguas, ya existían estos conocimientos y se realizaban toda una serie de festejos que se reproducían en toda una gran cantidad de civilizaciones. De hecho, incluso se ha propuesto la teoría de que en la edad de piedra podrían tener conocimientos relacionados con esto.
Debido al misticismo y a lo especial que es esta situación, podemos encontrar toda una gran cantidad de festividades, tanto en nuestras culturas como en otras culturas repartidas a lo largo del mundo. De la misma manera que la luna llena las fechas de los carnavales y de la semana Santa, la noche de San Juan y la emblemática Navidad están directamente relacionadas con los solsticios, tanto con el “solsticio de invierno” como con el solsticio de verano.
Se piensa que muchas de estas fiestas han sido heredadas de celebraciones de carácter paganas, aunque no se han encontrado evidencias de que realmente esto pudiera ser así.
En cualquier caso, ahora conoces que es exactamente un solsticio y cuál es el origen que lo determina.
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